Dorronsoro, que al igual que el resto no pasa por su mejor momento, sigue acumulando errores y cada vez se le ve más inseguro bajo los palos. La defensa ha pasado de ser la más segura, a convertirse en un camino de rosas para el rival, y la dinamita de la que presumía el equipo ha desaparecido en lós últimos encuentros.
En el momento en el que se adelantó el conjunto caballa, los locales vieron como los fantasmas de las anteriores semanas se les volvían a aparecer sobre el verde. La historia se repetía, y como otras veces, la solución nunca apareció. El Ceuta acabó matando el partido en un infantil penalti de Zamorano, y el incendio ya había tomado buena parte de la tribuna del Álvarez Claro. Las navidades son muy largas y hay tiempo para pensar, pero puede haber decisiones importantes en el transcurso de los próximos días. El turrón se le ha puesto muy duro a un Tébar que parece superado por el vestuario.
Y así, con esta imagen y estos resultados se acaba uno de los mejores años en la historia del club azulino. Lo que empezó de cara, acabó regalando su peor versión. Y para estrenar el 2011, el equipo visita el Carranza. Pero para eso queda mucho, y aún pueden pasar muchas cosas. Lo cierto es que el 'efecto Goikoetxea' ha dejado muy tocado al Melilla y la nave azulina ha comenzado a hundirse.
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